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Santo Domingo, Distrito Nacional, Dominican Republic

lunes, 1 de agosto de 2011

Mi Viejo


No importa el tiempo transcurrido desde su partida, los padres como Damián nunca mueren y no tiene sentido contar los años, sus ejemplos y enseñanzas viven con nosotros, que al final es lo que importa.

Éste día de los padres sentí el deseo de escucharle cuando veía un video de Danny Rivera interpretando Mi Viejo y las lagrimas, que nunca preguntan, irrumpieron con inquina, no pude contenerme y otra vez fui conminado a repasar sus enseñanzas, aunque no puedo hablar con imparcialidad sobre las cosas que logro para el, para nosotros y para la comunidad, porque no nos corresponde a sus descendientes evaluarla.

Pero lo que si podemos hablar es que nos enseñó a ser solidarios, a ser buenos Sabaneteros, nos enseñó que la humildad no tiene que ver nada con la pobreza, que ayudar cuando se puede es la mejor medicina para el alma, que respetar a los que merecen respeto se revierte en respeto hacia si mismo sin importar posición social y que servir a la comunidad, que fue siempre su inquietud, es la mejor inversión que se puede hacer por nuestras familias.

Damián Núñez nunca pensó tan solo en su familia, era un hombre del pueblo, es imposible igualar su desprendimiento y sus deseos para que la juventud estudiara, a lo que El no tuvo oportunidad, para dar uno que otro trabajito, porque a El en su momento se lo dieron y su obsesión por levantar el orgullo de su gente, que fue la preocupación principal del Señor Núñez, como le gustaba que le llamaran, feliz día del padre Damián, te lo mereces.

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