No perdamos la oportunidad

Por fin tendremos un candidato, en este caso candidata, a la Presidencia de la República cuyas aspiraciones están fundamentadas en su labor social, en su trabajo, en su dedicación. No habrá que votar por el menos malo, ni por promesas, ni arrastrados por fanatismos trasnochados, Margarita Cedeño solo necesita presentar su hoja de servicio.

La valoración que tiene la población de esta mujer es la que ha provocado que se le proponga como precandidata, no es por ser Primera Dama, muchas Primeras Damas han pasados y muy buenas, pero este es un caso muy especial, Margarita representa la mejor garantía de triunfo en éstos momentos.

Presentarla a los electores le inyecta un ingrediente fresco a la competencia, levanta los ánimos de sus seguidores y exacerba a sus contrarios. No existe un dominicano que desconozca o no haya sido tocado por las obras de esta mujer. En su trabajo se conjugan la Cruzada de Amor de Joaquín Balaguer, el “Por fin se Abrirán las Ventanas” de José Francisco Peña Gómez y la pulcritud en el manejo de los bienes públicos y la preocupación por los hijos de machepa de Juan Bosch.

Si a todo esto le agregamos la tendencia internacional donde se incrementa la participación de la mujer cada día, principalmente en America Latina, y el desempeño positivo de estas damas, no le quepa ninguna duda, estamos asistiendo al nacimiento de una candidatura que podría sorprender a los mas versados en la materia.

El modelo político se esta agotando, cualquiera que sea el sustituto de Leonel Fernández en el 2012, con excepción de Margarita, no le ofrece nada nuevo al país, ni siquiera se podría decir que es mas de lo mismo, sino menos. No tienen parangón las condiciones de Leonel y las de los demás candidatos de todos partidos.

Los dominicanos tienen la oportunidad de entrar verdaderamente en el siglo XXI escogiendo para la primera magistratura de la nación a una persona preocupada por los necesitados y codiciada por los empresarios. No perdamos la oportunidad,