Estamos en campaña electoral y  las cosas parecen definidas, dos propuestas dominan el escenario: el Anti-perredeísmo y el Anti-peledeísmo. 
Las discusiones están fundamentadas en demostrar quien   ha gobernado peor, las    diatribas y los chismes  han sustituidos las propuestas y las ideologías, estamos  en un despeñadero peligroso, es imposible construir un proyecto de nación cimentado en   ataques y   descalificaciones.
¡Despertemos¡, exijamos  propuestas para mejorar  las condiciones   de la población. 
Los partidos fanatizan a sus seguidores para endurecer sus simpatías, eso es entendible,  lo imperdonable es  que los medios y los comentaristas llamados a  informar  la población se dediquen a discutir  banalidades y tonterías para mantener esa situación, bajo las órdenes de   los  sectores disputantes,  con el propósito de evitar que el pueblo tome consciencia.
Aprendamos   a discernir, no nos dejemos manejar, “a palabras necias,  oídos sordos”,  escoja  gobernantes que piensen en  las mayorías,   no vote en contra de nadie,  no se deje llevar de sentimentalismos, vea y escuche, saque conclusiones y decida, su voto es mas importante de lo que usted piensa. . 
Quienes se preparan para gobernar se solidarizan  e  identifican con  su pueblo, no importa el partido al  que pertenezcan, el  candidato  presidencial debe tener  una “trayectoria política limpia”, acompañada de un discurso didáctico y con un gran poder de síntesis que demuestre un dominio de los problemas principales por los que atraviesa su país. 
En nuestras manos está el futuro de la nación, o nos unimos en los propósitos para lograr un país mejor o continuamos sacándonos “los trapitos al sol”, sumidos en el subdesarrollo, he aquí cinco condiciones de un buen candidato, según Global Visión:
1. Educación personal y/o experiencia de gobierno.
2. Historia familiar y/o trayectoria política.
3. Carisma o simpatía con el electorado.
4. Ideología política.
5. Presenta ideas positivas, entendibles y factibles de realizar en corto tiempo.
 

 
No hay comentarios.:
Publicar un comentario