El gobierno parece que se ha puesto viejo en 14 meses,  a pesar de la popularidad del presidente
Danilo Medina, 
porque la expectativa de cambio  de  funcionarios
se ha diluido,   provocando que se desvanezca la esperanza de muchos que trabajaron por su candidatura.   Si el presidente  no le gana
la batalla a la creciente desilusión en
la base partidaria, dándole  oportunidad a otros que también    merecen, porque muchos de los  que están,  están desde hace nueve años, la situación
podría tornarse inmanejable. 
Una oposición desesperada con doce años fuera y una decepción  in creciente en el PLD y aliados  que esperan
insertarse en el gobierno, es ambiente  propicio para  protestas y reclamos, que no  encontraran resistencia en la militancia
peledeísta, aunque no  la apoyaran públicamente, tampoco  estarán en contra, porque les podría servir como aliciente   para
que  los palaciegos se acuerden de ellos.
Los gobernantes están siempre bien informados, ojala no se
equivoquen y crean que por contar con   parte de la sociedad civil están resguardados. La
razón de ser de la llamada sociedad civil (o partidos sin militantes), es
suplantar a los que  gobiernan y a los partidos del sistema. Para eso les
pagan, para defender  intereses espurios. Preferir la sociedad civil por encima de los estamentos partidarios,  aunque sea importante,  es apostar a lo impredecible. No se si es lo
que esta sucediendo, pero es lo que parece. Aclaren bien las cosas para que
luego no se arrepientan.

 
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