Todavía tienen una oportunidad, quizás la última, el Partidos Revolucionario Dominicano (PRD) y el Revolucionario Moderno (PRM), para jugar el papel que los
dominicanos quieren y esperan de ellos. Un pacto, no que estampen la firma, sino que den señales inequívocas de que se está haciendo
un compromiso sagrado, que los votantes queden convencidos que se esta
ante algo serio, inviolable y definitivo para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del 2016.
Ese pacto tiene que ser solo para las presidenciales
en la segunda vuelta, dejando que todos los que quieran aspirar a las
municipales y congresuales lo hagan por sus respectivos partidos o aliados a su conveniencia. Si logran
vender la idea de que el que saque mas voto recibirá el apoyo solidario y militante
del otro partido hermano, sus posibilidades serían inconmensurables.
¿Es esto posible?, sinceramente creo que la confianza esta
definitivamente perdida, que prefieren engañarse entre ellos, que trabajarían para
que pierdan e intentar descalificarlo para
quedarse como cabeza de la oposición y eso es lamentable. Ojala que lo piensen bien,
que estemos equivocado, pero la historia nos ha enseñado los
esfuerzos que han hecho por años esos dirigente para destruir al partido de la
esperanza nacional y los mas sensatos debemos mantener esa esperanza, ya que a
ellos no les parece importar.
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