El tema de la Ley de partidos esta en el
tapete, principalmente en lo que tiene
que ver con el transfuguismo y la propuesta del PLD que si alguien elegido en
la boleta de un partido renuncia, pierde ipso facto el cargo electivo que
ostenta. Lamentablemente Minou Tavárez Mirabal es el referente mas
cercano que tenemos de una renuncia y a quien tenemos que
tomar como ejemplo.
¿Ustedes creen que Minou puede ganar sin el apoyo de un partido una
diputación? Pues NO.
Ni siquiera Leonel Fernández
ni Danilo Medina hubiesen ganado ni ganarían sus posiciones si van solos a
unas elecciones, Entonces, ¿a quien
debe pertenecer la posición que ostenta
un elegido?, ¿a ellos, que solos no sacarían ni los votos para
postularse o al partido que pone su militancia a votar por ellos?
Dejémonos de
pendejadas, Finjus y los que fuñen con esto, en vez de pedirle a los partidos que cedan
sus espacios a estos tránsfugas, que la Real Academia de la Lengua Española los define como
“Persona que
con un cargo público no abandona este al separarse del partido que lo presentó
como candidato”, que los apoye e incentive a formar su partido, o los ayude a ir independientemente, para que vean si el gas pela.
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