Comentaristas de Internet

En estos días me he dedicado a leer la mayor cantidad posible de comentarios que se hacen a las noticias en La Internet y quedé impactado por los irrespetos y las faltas ortográficas de los internautas, que acaban con todo el mundo y no tienen tiempo o capacidad ni siquiera para corregir un par de líneas que escriben.

Creo que nunca en la historia dominicana se había hecho tanto esfuerzo para demostrar nuestras faltas ortográficas, nuestro subdesarrollo, nuestros desconocimientos, lo atrasados que estamos y lo pretenciosos que somos, que hasta ignoramos que cuando escribimos en cualquiera de estas páginas de La Internet, estamos poniendo al desnudo nuestras carencias como ciudadanos, nuestras incapacidades y nuestras aberraciones como seres humanos.

Los epítetos ofensivos son el fruto de la falta de léxico para exponer una idea, cuando usted pretende ofender, y normalmente lo hace dos veces, con lo que quiere decir y como lo dice, demuestra su falta de capacidad para conceptualizar, y si lo hace consciente por ganarse unos cuantos acólitos, peor todavía, esta cometiendo un grave error, nadie es guapo cuando escribe en un tono desafiante, usted es un hombre con valor cuando sus actuaciones no se salen de los cánones morales y su comportamiento es ejemplo para la sociedad, cuando soporta las tentaciones hijas de esta descomposición sin contaminarse.

Aprovecharse y arremeter contra cualquiera, denostando e injuriando en la soledad de un lugar, acompañado de una computadora o de un teléfono móvil, mas bien parece una actitud poco correcta, hasta de cobardes, no se puede, de ninguna manera, callar las barbaridades y los abusos que cometen autoridades y ciudadanos, pero los comentarios deberían servir para enseñar y convencer, no para atacar y descalificar.

Hay que hacer consciencia y deponer actitudes para emprender un camino en el que se puedan lograr los objetivos que nos conduzcan a una sociedad mas justa, que todos actuemos con responsabilidad, que exijamos y aportemos, que pregonemos con el ejemplo. No hay manera de progresar si no nos entendemos, si no buscamos empujar en una sola dirección, un país pequeño dividido, es mas pequeño todavía, reflexionemos, no todos podemos hacer de todo, cada cual a lo suyo, a su trabajo, a lo que pueda desarrollar con mayor efectividad, ahí esta el secreto del progreso.