Una Sonrisa, Una Esperanza

"Es más fácil obtener lo que se desea con una sonrisa que con la punta de la espada”, dijo el dramaturgo y poeta inglés. William Shakespeare.

“La sonrisa es una verdadera fuerza vital, la única capaz de mover lo inconmovible”, según Orison Swerr Mardene, considerado el fundador del movimiento moderno del éxito en América.

Una mujer ha entrado a correr con posibilidad al escenario político dominicano, está abriendo caminos, despertando esperanzas dormidas. Súbitamente aparece una opción fresca, renovadora, que sin decir una sola palabra, ha levantado el optimismo de muchos y exasperado a unos cuantos con una sonrisa sincera y una labor social incuestionable.

Acaso está pasando lo que decía León Tolstoi que “El niño conoce a la madre por la sonrisa”, y los dominicanos están haciendo una analogía de esto con Margarita Cedeño.

Nuevos aires están soplando, una esperanza reflejada en un rostro comprometido con una sociedad de valores de seguro nos traerá un futuro promisorio, habrá detractores, alegarán que es más de lo mismo. Muchos que pregonaban la equidad de género se retractaran, sus intereses pesan mas o están penosamente equivocados, no aceptan que el viejo modelo se agotó, que no tiene respuesta para una población, ricos o pobres, que espera algo mejor y parece ser que una mujer inteligente, trabajadora, decidida y sensible será la que nos continuará guiando por senderos de progreso y bienestar.

Los pataleos se sentirán por doquier, permitir lo nuevo nunca ha sido fácil, las cúpulas partidarias reaccionaran, no aceptaran tranquilos la ruptura de sus esquemas e intentaran aprovechar el fanatismo que algunas veces obsesiona a los dominicanos para obstaculizar cualquier cambio, por eso la lucha será titánica, pero al final habrá valido la pena el intento por adecentar la política y las decisiones que emanan de ella.

Despojarse de prejuicios raciales, de machismos trasnochados, de partidismos frívolos nos puede conducir a la sociedad que soñamos y merecemos, aprovechemos la oportunidad, juntos podemos lograrlo. Si queremos un país nuevo, elijamos gente nueva.