Quién arreglará el problema del transito? En cualquier otro país del mundo nadie se hace esa pregunta porque las autoridades y las leyes se respetan, porque hay transportistas responsables y ciudadanos conscientes, que exigen sus derechos.
Pero en éste país las autoridades parecen ignorar que su función es respetar y hacer respetar las leyes, pero basta con ser guardia, policía o funcionario (o familiar o amigo de estos) para estar exonerado del cumplimiento mínimo de las leyes. Ni las cumplen ni las hacen cumplir.
A los transportistas les importa un bledo y saben que los políticos les temen, que no hay quien les exija nada, y la única forma para que no violen las señales de transito sería eleminandolas, quitandolas, que vivamos como "chivos sin ley", a donde casi hemos llegados.
Y los ciudadanos, el pueblo, al no tener quien los defienda, se han adaptado al desorden en vez de empoderarse y pregonar con el ejemplo para poder exigir a los responsables que salgamos de "'tollo" que se vive en nuestras calles. Que pena. Que vergüenza.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario